Me
detuve a mirar al suelo un rato
Rodeado
por inconformidad,
Seres
de sangre y caducidad
Me
llevan por un violento rio de conspiraciones
Pero
el suelo es digno de ser contemplado.
Los
espejos caminan y hablan
Respiran,
palpitan,
Lloran,
gritan
Y
absorben lo que antes me resultaba esencial.
Temo
que poco a poco me convierta en uno de ellos
En
ese momento se habrá perdido toda esperanza
Al
saber que lo único que reflejaría es el reflejo mismo.
El
mundo es una fábrica de arte
Pero
yo en lo personal desconozco mi número de serie,
Dejando
que mis manos fuesen curiosas
Permití
a mi cerebro estar hambriento de verdad
Y
la verdad es que mi cáscara ya no es fertilidad.
Ya
no soy digno de atención…
Y
a grandes rasgos
Soy
como todos los demás que se emocionan con citas de segunda
Y
con un dichoso conformismo,
La
diferencia es que yo lo noto
Y
como los demás
Lo
único que quiero es ser feliz,
La
diferencia es que yo no me lo permito.
Nada
es libre
Incluso
las luces están atrapadas en cristales y estrellas.
Es
tan deprimente darse cuenta
Que
si caminas en línea recta,
A
pesar de el camino elegido
Eventualmente
volverás
Justo
al lugar donde
Comenzaste.
Hay
que saber cuando dejar de creer
Y
aceptar que el planeta es redondo,
Los
ojos son redondos
Y
que la vida es un círculo, frío y sátiro.
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